lunes, 26 de abril de 2010

Enanos y elfos en la Edad Media

A ver si con unas pocas líneas consigo que os pique la curiosidad por este maravilloso ensayo del francés Claude Lecouteux, profesor de literatura y civilización alemanas de la Edad Media en la Universidad de París IV-Sorbona... ^^


"¿Dónde quedaron los tiempos en que a la hora del crepúsculo se ponía ante la puerta el objeto roto en espera de que los enanos lo repararan antes del alba? ¿Qué se hizo de las ofrendas -alimentos o ropas- que iban a poner en el árbol del patio, en el granero o en el establo? Eso era antaño, cuando los enanos todavía tenían trato con los hombres, cuando forjaban espléndidas armaduras y espadas que siempre estaban afiladas, y joyas en las que centelleaban gemas de virtudes maravillosas. En aquel lejano pasado, los enanos devolvían al buen camino al caballero perdido, o por el contrario se burlaban de él y lo humillaban. Iban a buscar a los valientes para que los librasen de un gigante o de un dragón que les hacía la vida imposible. En aquella lejana época, Berta hilaba, Carlomagno temía encontrarse con las hadas, la reina Piedeoca escondía su pie de ansarón en los pliegues de su manto, y san Brandán se lanzaba a la busca del paraíso terrenal. Era la Edad Media. Campos, bosques y arenales, aguas y montes bullían de vida oculta; la naturaleza estaba poblada por mil criaturas, las más de las veces habitantes de noche, y entre éstos estaban los enanos.

Gobelins o lutins, elfos y duendes, ¿quién sabría hoy qué fueron en el mundo de antaño, antes de convertirse en pequeños personajes de cuentos maravillosos y leyendas?

[...] Éranse una vez los elfos y los enanos. Era hace mucho, mucho tiempo..."


13 comentarios:

  1. Ayy qué guay! Es que antes nos lo creíamos de verdad, eh!
    Yo siempre lo diré: cuando era pequeña vi una vez un gnomo, Iba en coche por una carretera y os prometo que lo vi, estaba cerquita de un árbol que era su casita :D

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  2. XD ¡Pero Isi, hombre, cuéntanos algo más! ¿Cómo era el gnomo, por ejemplo? Pues yo tengo que decir que me pegué muchos años de mi infancia buscando gnomos y lamias y círculos de hadas en los frondosos bosques y ríos del norte de Navarra y no hubo manera... ;)

    ¡Ah! Y conozco a una persona que jura y perjura que una vez vio un hada, y no precisamente de pequeño. ^^

    ¡Un besote!

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  3. Jo, si alguna vez monto una librería da por contado que te llamaré para hacer sociedad: ¡qué manera de vender! Je, je... ¿Pues no me tienes ya buscando el libro? Vaya tela...

    Oye, pues yo me la pasé buscando luciérnagas (que hoy día son más difíciles de ver que los gnomos), aunque sé de una que tenía pasión por ellos, jejeje. Si hasta hace poco se hizo con un librito sobre su vida y costumbres, y tampoco es precisamente una niña... :D

    Yo recuerdo un libro en el que leí, hace siglos y siglos, tanto ya que no recuerdo su título aunque lo he intentado en numerosas ocasiones, cómo los duendes y trolls raptaban a niños y los sustituían por los propios, haciendo que los humanos los criasen por ellos y educando a los niños robados en sus costumbres. Me encantaban aquellas historias.

    Un besote.

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  4. Homo Libris: ¡Qué exagerado, ja, ja, ja! Tus palabras me honran, pero admitamos que esta vez no he necesitado mucho: las frases de Lecouteux se bastan y sobran por sí solas para conseguir que le pique el gusanillo a cualquiera. ^^
    Te recomiendo la Casa del Libro, que fue donde yo lo compré, ji, ji. XD

    Por cierto, "El niño robado" de Donohue va precisamente de la historia de un niño que es robado por los duendes y suplantado por uno de ellos. No es una maravilla de libro, pero entretiene y se deja leer. Y ha salido en bolsillo. ;)

    ¡Un besote!

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  5. Tengo la impresión de que la tradición de los gnomos, elfos, etc. existe sólo en la Europa no romanizada (aproximadamente la mitad Norte).

    Creo que en el Sur era distinto, restos de los dioses romanos de la naturaleza, los genius loci, los lares, etc. que desaparecieron con el cristianismo.

    Curiosamente, los primitivos obispos cristianos no negaban la *existencia* de los diosecillos paganos, sólo desaconsejaban su *culto*.

    Pero en este terreno estoy fuera de mi especialidad...

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  6. Es que creo que si los buscas, no los ves. Yo simplemente iba en el coche mirando por la ventanilla y ¡allí estaba! se había quedado quieto, para no llamar la atención, no lo vi meterse en su árbol ni nada, sólo estaba allí. Pero como pasamos enseguida, pues no pasó nada más.
    Ah sí: que se lo conté a mi madre. Le dije que había visto a David el gnomo, y ella me dijo que igual no era justo David... que podía ser otro. Así que me quedé con que había visto un gnomo, sin entrar en identidades concretas.
    Bueno, le reconocí porque, obviamente, llevaba un sombrero picudo rojo.

    Jo Homo libris: pues me da pena, porque yo luciérnagas sí que he visto. En el sur precisamente (Málaga, de vacaciones).

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  7. Entangled: precisamente, Lecouteux habla también de los lares y otros dioses romanos que se relacionan por determinadas características con estos seres del norte de Europa. La verdad es que su libro es un estudio erudito pero a la vez muy accesible a todo tipo de público. ^^

    Isi: tu historia me parece una de las anécdotas más cucas que me han contado jamás, de verdad. Gracias por compratirla aquí... ¡Y por tus preciosos marcapáginas que ya estoy usando! XD

    ¡Un abrazo a los dos!

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  8. Queridísima Alienor: a pesar de contarte mis anécdotas con los gnomos y de enviarte mis marcapáginas, creo que vas a dejar de ser mi amigüita... Y la razón es porque... ¡me he enganchado a los libros de Charlaine Harris! No he podido evitarlo: primero me enganché a True Blood y ahora, que mi novio aún no ha terminado de bajarse la segunda temporada, he tenido que empezar a leerlo porque no me puedo aguantar de saber más.
    Entenderé si no me hablas nunca más... es que la mente humana es débil ;)

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  9. Isi: ¡Noooooooo! Aunque podría ser peor: podría gustarte "Crepúsculo", ¡ja, ja, ja! XD
    No, hombre, que es broma. Cada uno a leer lo que le guste y apetezca.

    Y por cierto, que no es por jorobar, pero ya me ha dicho mucha gente que curiosamente está mejor la serie de televisión que los libros. Yo de hecho ví la primera temporada y me gustó.

    Lo que me ocurre es que estoy harta de los nuevos vampiros y de la moda a lo Victoria Francés. Yo me quedo con mi Nosferatu y fuera todo lo demás. No sé qué hizo más daño al vampirismo verdadero: Anne Rice o la Meyer. Y lo dice una que fue muy fan de las "Crónicas Vampíricas" en su adolescencia... ;)
    ¡Un besote!

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  10. Interesante libro... a ver si me lo agencio un siglo de estos porque toca uno de los temas que más me ha gustado siempre aunque, paradójicamente, he leído muy poco.

    Una duda, la aparente falta de tradición faerica en España, ¿se debe a nuestra tradición cultural romano-cristiana o a un simple desconocimiento académico del tema a nivel nacional?

    Por cierto, si a alguien le interesa, hay una película protagonizada por el gran Charlton Heston, "El Señor de la Guerra", sobre un noble normando al que envían a gobernar un "castillo" en una zona expuesta al ataque de los jutos. Se muestra, de un modo prodigioso, como el Cristianismo, pese a que ya existía desde hacía casi 800 años en la zona, se fusiona con diversos aspectos druídicos y paganos.

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  11. Amandil: hay leyendas feéricas en España; de hecho, hay algunas recopilaciones de ellas en editoriales como Siruela, si mal no recuerdo. Generalmente se engrupan por regiones: en Navarra y el País Vasco sí que tenemos libros temáticos, por ejemplo. Lo que pasa es que creo que llaman más la atención las leyendas nórdicas sobre estos seres y, además, son más abundantes. ^^

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  12. En efecto, en algunas zonas de España hay un mayor "conocimiento" del folklore local pero, ¿generalizado o anecdótico? Además, existe a su vez un intento de apropiación de algunos elementos por parte de los nacionalismos para remarcar la diferencia milenaria y tal y cual.

    Echo en falta, sin embargo, que en todo el país haya un mayor conocimiento de la riqueza "faérica" presente de un modo u otro en nuestra cultura.

    Ahora, también es cierto que, nuestras raices mitológicas fueron alteradas y modificadas en la misma antigüedad por la arroyadora cultura greco-latina. Y esta a su vez fue absorbida y transformada por la religión Cristiana.

    En el Norte, empero, su mitología es más reciente (medieval, incluso) y ha logrado influir, por medio de la literatura esencialmente, en la cultura occidental hasta nuestros días. Así, hoy todos sabemos qué es un "enano" (aunque estemos encasillados entre los extremos Disney-Tolkien)o un "elfo" (con predominio tolkiénico, en este caso).

    En fin, habrá que inventar una mitología para España ;)

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  13. Creo que coincido contigo en tu idea de la utilización de este tipo de leyendas para determinados nacionalismos, es verdad. Igual que lo de que en nuestra península predomina más la influencia latino-cristiana que estas tradiciones: necesitamos un Tolkien para España, ¡ja, ja, ja!. ;)

    ¡Un besote!

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